Cuando un chavo te anda rogando para que salgas con él, no le haces caso, y al final pierde el interés, ¡te duele!
Es muy común que esto pase; un galán te está persiguiendo y tú no le das ni la hora del día, pero nada más lo ves con otra o que ya no te busca, y no puedes dejar de pensar en él, ves algo en tu chico que antes no habías notado; ¡te vuelves loca!
La razón de esto es que a todas las mujeres les gusta que las halaguen, incluso cuando no tienes interés en el otro; por eso cuando pierdes esa atención, sientes que lo necesitas y te empieza a atraer ese chavo. ¡Es tan típico!
Lo que necesitas hacer es alejarte un poco de la situación y pensar si realmente te gusta el niño al que traes loco o sólo extrañas que esté a tu lado y te vea como si fueras su diosa. No es justo para él que si tiene la oportunidad de salir con alguien que sí lo valora, tú le des alas sólo para mantenerlo alabándote. En caso de que sí te guste, entonces pueden darse la oportunidad de salir, conocerse y ver a dónde los lleva la relación.
La indiferencia duele, ¡definitivo! Pero hay que aprender a valorar a la gente que es bueno tener a tu lado y a la que es mejor dejar ir. ¿Este es tu caso? ¡Cuenta tu historia!
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